El infinito en un junco de Irene Vallejo
Buenos días de lunes ¿Qué tal habéis pasado el fin de semana? Yo ya he podido disfrutar por fin de unas horas de playa ¡Lo que lo echaba de menos! Y la verdad es que, al menos donde yo he ido, me ha sorprendido la actitud de la gente para bien. Ojalá sigamos así. Hoy os comparto mi opinión sobre un libro que me ha gustado un montón. Turno de El infinito en un junco de Irene Vallejo.
Un recorrido por la vida del libro y de quienes lo han salvaguardado durante casi treinta siglos. ‘Muy bien escrito, con páginas realmente admirables; el amor a los libros y a la lectura son la atmósfera en la que transcurren las páginas de esta obra maestra’ dicen, entre otros, Mario Vargas Llosa.
Ganas no, ganazas tenía de disfrutar de principio a fin de este ensayo sobre libros, este viaje alrededor de la historia de los libros desde la antigua Roma. La desaparecida Biblioteca de Alejandría, el antiguo Egipto, la aparición del alfabeto, los talleres de los copistas son sólo algunos de los escenarios que vamos a ir recorriendo página tras página.
Un viaje, un auténtico y maravilloso viaje en el tiempo a través de los libros y del amor por ellos. Como se leía antes en voz alta hasta llegar a los primeros lectores silenciosos, esos que se sumergían, como hoy en día, entre las calladas páginas de los libros; los que iban descubriendo en ellos la posibilidad de aprender pero, también, de entretenerse y conocer o vivir aventuras sin despegar los ojos de los libros.
Y es que Irene Vallejo ha hecho algo tremendamente complicado, al menos a mi entender. Es muy difícil hacer atractivo un ensayo sesudo, porque aquí hay muchos datos y una amplia documentación, pero lo ha conseguido. Una vez que empiezas a leer, te puede la curiosidad y las ganas de saber más, de conocer más nombres de libros y estudiosos de la antigua Grecia, de relatos o tradiciones que se han mantenido hasta nuestros días.
Si bien es cierto que os recomiendo leerlo con calma. Yo no lo hice así y, aunque lo disfruté muchísimo, es cierto que, poco a poco, los datos van calando, las anécdotas se nos van quedando en la mente del lector y tienes la oportunidad de ir profundizando en aquellos pasajes que nos resulten más interesantes.
Porque sí, El infinito en un junco de Irene Vallejo es un libro académico, para aprender, pero rezuma amor por los libros en todas sus páginas y es incalculable la labor de documentación, análisis de datos y síntesis que ha tenido que hacer la autora en este libro.
Irene Vallejo (Zaragoza, 1979) estudió Filología Clásica y obtuvo el doctorado europeo. En la actualidad se dedica a la divulgación del mundo clásico impartiendo conferencias y a través de su columna semanal en el diario Heraldo de Aragón. De su obra literaria destacan las novelas La luz sepultada (2011) y El silbido del arquero (2015), la antología periodística Alguien habló de nosotros (2017) y los libros infantiles El inventor de viajes (2014) y La leyenda de las mareas mansas (2015). El infinito en un junco es su última publicación.
No os quiero contar mucho más sobre El infinito en un junco de Irene Vallejo porque merece la pena que lo descubráis por vosotros mismos. Si os gusta leer y aprender sobre libros, este ensayo os transportará a unas horas de mágica lectura que, te recordarán, por qué te gusta tanto leer y el verdadero poder de los libros.
¿Quién se anima?
Editor: Siruela Ensayo
Fecha de publicación: 2019
Colección: Narrativa Española
Nº de páginas: 452 págs.
ISBN: 9788417860790
Precio: 24,95€
8 Comments
Ya lo tenía fichadito y tu reseña me confirma que lo tengo que leer sí o sí.
Besotes!!!
Sin ninguna duda ¡Sí!
Me lo regaló mi padre este Dia del Libro, así que lo tengo esperando y con muchas ganas de sacarle hueco
Besos
Pedazo de regalo, ya verás
¡Hola! Me llamaba mucho la atención pero me he quedado atascada con Alejandro. Es demasiado denso para mí y lo dejé, aunque igual también me cansó más porque intenté leerlo en el iPad, a lo mejor en papel… Mi ignorancia no tiene cura.
Besos
Léelo despacio y no del tirón. Lo disfrutarás y en papel mujer, en papel
Pinta muy interesante, pero no suelo animarme con los ensayos.
Besos.
Oh, pues está genial