Atomka de Franck Thilliez

Buenos días 🙂 Hay veces que mis libros pendientes se quedan sepultados bajo otros muchos volúmenes. Tengo una torre, ya no puede llamarse montón, en el escritorio de mi habitación. En ella voy poniendo los pendientes más urgentes de leer, bien porque sean envíos editoriales o libros que he comprado y me apetece mucho leer. De estos últimos es la novela de hoy. Mucho tiempo esperando su turno pero, por fin, he podido leerlo y disfrutarlo al máximo. Os hablo de Atomka de Franck Thilliez.

A pocos días de Navidad, un suceso de gran envergadura irrumpe en las vidas de Lucie Hennebelle y Franck Sharko, policías de la famosa sección criminal del número 36 del Quai des Orfèvres. Aparece el cadáver de Christophe Gamblin, periodista de sucesos, encerrado en el congelador de su casa y su compañera desaparece mientras llevaba a cabo una serie de entrevistas sobre un caso explosivo del que nadie conoce los detalles. La única huella que parece haber dejado es su nombre garabateado en un papel que conserva un niño vagabundo y muy enfermo.

Quinto libro, creo, de la serie protagonizada por los inspectores Lucie y Franck. Si ya habéis leído las novelas anteriores, sabréis en qué punto se encuentra la relación personal de ambos policías y las fases por las que han ido pasando. Yo, por si acaso, me voy a ceñir en la reseña sólo a la parte policial del libro ¡Así no hay riesgo de spoiler!

Dicho esto, nos encontramos ante un caso bastante negro y complicado de resolver. Sharko, que ya sabemos que es un policía poco amigo de las normas, ya ha tenido algún problema en su Comisaría precisamente por eso. Ahora se tiene que enfrentar a un caso espeluznante. Un periodista aparece encerrado en el congelador de su casa. Cómo ha llegado ahí o por qué alguien le haría algo semejante son las primeras piezas que Sharko y su equipo tienen que encajar.

A todo esto tienen que sumarle la aparición de un niño extremadamente delgado y desnutrido que no habla pero que tiene en su poder una nota de una compañera periodista de Christophe. Esta periodista lleva días desaparecida. ¿Le habrá sucedido algo?

Preguntas, preguntas y más preguntas mientras las agujas del reloj no hacen más que avanzar rápidamente. ¿Están conectados ambos casos? ¿Qué investigaban los periodistas? ¿Hay más muertos o desaparecidos? Ya sabéis que, en estas novelas, las preguntas aparecen a cada párrafo.

Como ya conozco a Franck Thilliez sabía a lo que me enfrentaba. Una novela que engancha, aunque algo menos que la anterior, que mezcla tramas policiales con temas más personales y que, estos sí, van encadenados de novela en novela. Me ha gustado mucho Atomka, principalmente en la parte final cuando Lucie y Sharko visitan una zona del mundo buscando respuestas. El escenario, que a mi se me ha figurado bastante tenebroso, me ha parecido magnífico.

Como decía, los temas personales de ambos protagonistas vienen heredados de novelas anteriores. Después de conocer el problema de Lucie en la novela anterior, en esta veremos cómo la policía pone todo su empeño en salir adelante y enfrentarse de nuevo a su trabajo diario. Respecto a Sharko…los demonios del pasado le persiguen y ya os digo que en los siguientes libro seguirán ahí porque no se resuelve nada relacionado con este tema.

Muertes, destrucción, secretos, duelos… se suceden entre las páginas de este libro que tiene bastante ritmo pero cuya historia me ha resultado más apagada que en entregas anteriores. Aun así…¡pasa de todo!

Atomka de Franck Thilliez es una novela negra de las que a mi me gusta. De esas que enganchan por sus tramas policiales pero también por los personajes. Ay, esos Lucie y Sharko… Ya tengo en casa pendiente de lectura la siguiente entrega y os confieso que no pienso tardar mucho en leerla. A ver si lo cumplo.

¿Os animáis con esta serie?

Editor: Destino

Fecha de publicación: 2013

Colección: Narrativa Extranjera

Nº de páginas: 560 págs.

ISBN: 9788423346288

Precio: 21€