Buenos días de lunes 🙂 Voy descontando jornadas para las vacaciones. No sabéis las ganas que tengo de desconectar, visitar una nueva ciudad y vivir unos días sin preocuparme por las tareas pendientes. ¿De eso se trata, no? Mientras ese momento llega, me dispongo a contaros cosas buenas sobre una novela que me compré en el Día del Libro. Turno de Almendra de Won-Pyung sohn.
Yunjae tiene dieciséis años, está en la edad de las emociones desbordadas, el amor y la rabia. Pero las amígdalas de su cerebro son pequeñas, más pequeñas que una almendra y, como consecuencia, Yunjae es incapaz de sentir nada. Educado por su madre y su abuela, aprende a identificar las emociones de los demás y a fingir estados de ánimo para no destacar en un mundo que pronto lo tachan de extraño. «Si tu interlocutor llora, tú entrecierra los ojos, baja la cabeza y dale una suave palmada en la espalda», le dice su madre. Así construye una aparente normalidad que se hace trizas el día en que un psicópata ataca a ambas mujeres en la calle. Desde entonces, Yunjae debe aprender a vivir solo, sin deseo de derramar una lágrima, sin tristeza ni miedo ni felicidad.
De vez en cuando hay que salir de la zona de confort. Animarte a leer cosas que no acostumbras, te lleva a localizar verdaderas joyas. Eso me ha pasado a mi con este libro. Lo compré, como os he dicho, en el Día del Libro. No estaba en mi lista de deseos pero mis amigas, que ya lo habían leído, me animaron a ello. He hecho bien, ya os digo.
En Almendra conocemos a Yunjae. Él es un joven de dieciséis años que es incapaz de sentir nada. ¿Os imagináis lo que eso puede suponer? No siente dolor, pena, amor o rabia. Sus emociones no se desbordan, es incapaz de sentir y eso le hace parecer distante y frío.
Yunjae vive con su abuela y su madre, que regenta una librería. Un día Yunjae vive un evento dramático que le obligará a desenvolverse sólo y salir adelante sin ser capaz de reflejar ninguna emoción.
Es entonces cuando empieza a cruzarse con personas que harán por ayudarle y otras que lo que harán será molestarle, importunarle y hasta hacerle daño. Me ha gustado especialmente la voz narrativa del protagonista, cómo se enfrenta a un mundo que lo cree insensible, cómo consigue sentir a su manera las cosas que le van pasando y hacerse un hueco en el mundo que pueda parecer que no está hecho para él. Muy muy bonito.
Won-pyung Sohn nació en 1979 en Corea del Sur y ha desarrollado una trayectoria profesional como escritora de novelas y directora de cine. Sus premisas suelen ser sorprendentes, a medio camino entre la fantasía y la realidad, pero con Almendra se ciñó a una enfermedad real y ha conseguido, de lejos, su mayor éxito literario hasta la fecha.
Me ha gustado mucho descubrir a esta autora y su novela Almendra. Siento especial predilección por los libros narrados por niños o adolescentes. Entiendo, o creo, que hacer creíble una narrativa desde el punto de vista de un personaje de edad inferior debe ser bastante complicado. Y en Almendra se consigue con creces.
Si os gustan este tipo de novelas y disfrutáis con estas historias, dadle una oportunidad a
Almendra de Won-Pyung sohn.
Editor: Temas de Hoy
Fecha de publicación: 2017
Colección: Narrativa Extranjera
Nº de páginas: 256 págs.
ISBN: 9788499987910
Precio: 15,95 €
Comment
Pues me dejas con curiosidad. Tomo muy buena nota.
Besotes!!!